miércoles, 19 de enero de 2011

Los momentos de la vida

LA IMPORTANCIA DE LOS ROLES SECUNDARIOS, O DE LOS PAPELES SECUNDARIOS.


En nuestra vida sabemos de ser protagonistas. Es lo primero que aprendemos, pero quizás no a todos nos tocó un buen papel protagónico, SER SU MAJESTAD EL BEBE, como decía SIGMUND FREUD.
A muchos de nosotros eso se tradujo en "que hacemos ahora...con esto?".
Cada uno tiene la vida que tiene, pero todos tenemos momentos que protagonizamos. Y momentos en que secundamos. Ambos lugares son igualmente importantes. Mis padres, actores ellos, me hablaban de ello.
Estoy planchando, mientras escucho musica, baremboin, un apólogo y ferviente luchador por la paz en medio oriente. Un argentino.
Mientras tanto pienso en mi hija de 14 años que se fue al cole, y que hasta la noche no la veo, pero no porque yo no estoy sino porque ELLA NO VA A ESTAR.
nosotras las mamás de hijas que empiezan a hacer su vida, nos damos cuenta de que, sin previo aviso...pasamos a un lugar secundario, aparentemente, en la vida de nuestras hijas.
Ellas y ellos nos dan un beso, a veces, ni siquiera. Comen lo que le hacemos, nos escuchan o hacen que nos escuchan, mientras su cabecita vuela, y si sabemos nosotros que vuela¡¡¡
Recordamos cuando teníamos esa edad y seguramente nuestra mamá era alguien muy necesario, pero que estaba ahí, como está el árbol de la puerta, la casa, el aires y el sol. Nadie duda de eso, hasta que lo pierde. Me corrijo, eso es lo que debiera pasar si todo anda bien.No siempre pasa.
Lo cierto es que mientras plancho y disfruto de la tranquilidad de la mañana, algo de esa cosquilla que me da el sentir el compas del tiempo me conmueve. Y ese conmoverme no es triste, ni nostálgico, ojo, es simplemente movilizador.
Me dice que mi hija me necesita de otra manera, y que yo puedo ahora disfrutar de un alivio porque ya no soy impresindible como un bombero, o abierta todo el día como una iglesia.
Ahora puedo recuperar mis espacios de disfrutrar de amigos y amigas, de leer, de conocer esa música que no tuve tiempo de conocer, por pañales, laburo etc.
Tiempo y placer.
El paso del tiempo puede ser una sensación extraña con un aroma maravilloso, al igual que el placer de desempeñar un papel de acompañamiento.
En la política, en la vida profesional, en la vida familiar, hay momentos para ser protagonista y momentos para ser acompañante.
Hoy siento el placer de ocupar con mi hija el PAPEL SECUNDARIO. Si yo no lo desempeño, la dejo sola, la hago prematuramente ocupar un lugar de adulto.
QUE IMPORTANTE Y FUNDAMENTAL PUEDE SER OCUPAR UN LUGAR SECUNDARIO.
Ojalá este criterio pudiese aplicarlo en todos los momentos, sabiendo darme cuenta cual es mi lugar, a veces el de PROTAGONISTA, y decirte, amigo, que te quiero, y que sos mi compañero, y a veces, el de la dama de compañia, que prepara el ajuar de la princesa de la casa.

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