Así como un estado de enamoramiento puede hacernos confundir atracción sexual con amor, un estado de ira. nos puede llevar a sobre-dimensionar  la situación que la originó. 
Démonos tiempo para tomar distancia y acordar la posibilidad de realizar un diagnóstico adecuado de la situación. 
Siempre hay tiempo para tomar una medida correctiva con un niño, pero a veces es demasiado tarde para retroceder ante una reacción impulsiva. 
| Konstantin Korobin | 
 
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario