viernes, 14 de octubre de 2011

LA SEÑORA OBEDIENTE.

"...Era una mujer tan obediente...que no se animaba a dar su opinión ni hacerla valer". 
La obediencia indiscriminada es SOMETIMIENTO. 

SEMEJANTES: parecidos, con características comunes esenciales. Con fallas, errores, como uno, con aciertos y desaciertos. Humanos. 
Cuando los otros no son vistos como semejantes, se los idealiza o denigra. Ambos extremos, y formas de segregar, de marginar. 


Volviendo a nuestra señora, ella sobre valoraba al otro, y finalmente, como toda OBEDIENTE, terminaba rompiendo el vínculo con esa persona tan estimada.
Esto no es extraño, dado que para poder mantener una relación estable con alguien es fundamental participar en ella desde un lugar DE PAR, sin por ello desconocer la importancia del lugar del otro, su opinión, su postura.
De la sobrevaloración a la desvalorización o la ruptura hay un paso. 
RENSO CASTAÑEDA
DESPUÉS DE TODO, DENTRO DE CADA SUMISO, Y CADA OBEDIENTE, HAY UN GRAN REBELDE ESCONDIDO, ESPERANDO AL ACECHO. 

1 comentario:

  1. GUAU, OBEDIENTE A MI SIGILO Y NEUTRAL A MIS PALABRAS; ASI LA QUIERO.
    TODA, MÍA.

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