sábado, 29 de enero de 2011

RE FLEXIONES

Cuando me enojo mucho con alguien, dudo. Y me miro el alma. 
Algo me dice que estoy siendo "demasiado severa" con una actitud ajena.
Lo cual me hace pensar que no es ese alguien el motivo fundamental de mi enojo, sino algo mucho mas personal, algo mío. 
Hay un montón de actitudes mías que no me gustan, pero, sin duda, enojarme es la que además de triste, me deja solo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Buscar este blog