La capacidad de mejorar nuestra atención sobre nuestros actos nos lleva a ser conscientes de lo que hacemos, y poder modificar aquellas cosas que nos están haciendo daño, y privando de cumplir con proyectos.
Es un hecho demostrado científicamente hoy, que, al no estar atentos sobre actitudes que realizamos de manera rutinaria o automática, ni siquiera recordamos que las hemos realizado.
Reentrenar esta capacidad, la conciencia, nos va a permitir, fundamentalmente, trabajar sobre nuestros malos hábitos, como la adicción al tabaco, y la comida de más, los excesos de trabajo, la falta de descanso y demás hábitos que reducen enormemente nuestra capacidad de disfrutar de una vida plena.
William Waterhouse |
No hay comentarios:
Publicar un comentario