domingo, 1 de mayo de 2011

COMER ES UN PLACER???




FERNANDO BOTERO
El mayor problema que tenemos cuando queremos dejar de depender de algo que nos hace daño, como es el caso de la comida en exceso, el cigarrillo, el alcohol, las relaciones violentas, reside la aparición infaltable de la frase mágica, SANA SANA COLITA DE RANA.
"mañana empiezo".
Y mañana se torna generalmente en un lunes donde en la agenda uno ha ido anotando en la semana anterior, cuando no en las precedentes, una serie de citas tan impostergables, que la pequeñísima intencion de hacernos del tiempo para hacer nuestra dieta, realizar nuestra sana caminata, nos resulta un disparate impensable.
Es siempre mas importante aquello que nos aleja de lo que nos tiene preso.
Es bien sabido por los médicos de todo el mundo que la obesidad es hoy en día ya una PANDEMIA. Es la enfermedad no contagiosa mas extendida en el mundo.
No obstante, no se toman medidas preventivas suficientes aún. Por ejemplo, empezando por impartir una conducta alimentaria sana a los niños en las casas.
No toda persona gorda, o con sobrepeso tiene que pensarse como enferma.
Pero está demostrado que de el exceso de peso dependen múltiples enfermedades como la hipertensión arterial, la diabetes, el higado graso, la insulinorresistencia.
Además de las privaciones a las que se ve expuesta una persona que ha aumentado de peso mas de diez kilos.
Los primeros diez kilos de más nos alejan del espejo y de la balanza. Y luego los otros nos llevan al médico y a los distintos padecimientos.
Hoy en día ya está demostrado también que, más allá de las afecciones que el sobrepeso genera, el hecho de adquirir la conducta de comer de más, de canalizar de esta manera la gratificación ante frustraciones y malos momentos, así como el festejo de todos los eventos dignos de ser compartidos en nuestra vida diaria, ha llevado a la mayoría de la población a vivir para comer.
La comida se ha transformado en EL OBJETIVO de toda reunión. Mal que le pese a algunos que lo niegan, hasta el teatro o la película a veces se tornan en meros preambulos de la deseada dosis de pizza, o postres que se espera para coronar la velada del viernes o el sábado.
Así, el domingo es un día de pesadez, donde, en lugar de movernos y hacer cosas que comunmente no podemos realizar, nos vemos constreñidos a recuperarnos de los excesos de los días previos.
El lunes es el peor día para un trabajador, el que más cuesta enfrentar, y allí, en ese día, es donde depositamos la tan necesaria DIETA.
Es así como terminamos aceptando como normal estar con kilos de más, asímilándolo a consecuencias de la edad, y no del exceso en el comer.
Y nos vamos restringiendo en movimientos, en actividades nuevas, para no moderar a nuestra casi única amiga: la comida.
Esto que escribo exagerando para que se entienda claramente, es la descripción de la adicción que mas pesa, valga la palabra, en la actualidad. Y además, cuenta con la total impunidad de la comunidad, ya que decirle a alguien que está gordo, es mucho mas agraviante que decirle que es un H DE P.
Entonces, como seguramente quien está muy pegado a la comida ni leerá esta nota, aquella persona que pueda separarse por un segundo de pensar en lo que va a comer en la cena, o la torta del domingo, a ella me dirijo.
Se puede comer de todo, disfrutar del placer de una buena mesa, solo cuando uno no ha caído en las garras de la comida de más.
Esto es tratable, modificable. Como todo mal hábito, requiere un replanteo conductual, sin pensar ni escribir tanta agenda. Solo empezar a decir NO a la comida de mas.

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